No hay mejor cosa que salir de trabajar
e ir a cenar con unas compañeras de trabajo, presta mucho, por la
compañía, por las risas, vamos todo un lujazo.
Una noche agradable ( ¡Octubre!) y
buscamos terracita para cenar, todo genial, la cena muy rica pero …
llegó la hora de los postres. Te da la carta y te dice el chico
varios postres “de la casa” y te decides por uno. Llega el esperado dulce
y la cara que se le queda a una es proporcional al sabor del trozo de
tarta que te ponen en el plato.
En mi sincera opinión, los postres
suben la cuenta si, pero a mi no me molesta subir la cuenta siempre y
cuando se disfrute con el sabor del trocito que te sirven. Lo que si
me molesta es que en ese momento eches de menos el yogur de frutas
del busque que tengo en la nevera.
Pues nada, al día siguiente me puse
manos a la obra para hacer un nuevo postre con aires otoñales, lo de
siempre mirar y mirar recetas, ver ingredientes y comparar como
quedaría con mas o menos cositas.
El ingrediente base nueces. ¡Me
encantan las nueces!
Este es el resultado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario